Este año he aprendido muchas cosas. Principalmente he aprendido que la familia y los amigos son lo único por lo que debemos luchar, pero no amigos cualquiera, sino los de siempre, los de toda la vida. He aprendido que los "para siempre" son un mito y los "imposibles" existen, pero en algunos casos solo tardan un poco más. He aprendido que quién no te busca, no te extraña y quién no te extraña, no te quiere. Que quién dijo quererte, hoy ya no está. Y de tanto aprender las cosas, me he dado cuenta de que daré la vida, por aquel que sepa corresponderme y no por el que me de la espalda a la primera de cambio. Me he dado cuenta de que este país cada vez va peor y no hacemos nada para remediarlo. Que vivimos en el mundo para que haya de todo, pero también que para que sea mundo tiene que haber de todo. He aprendido que a pesar de todo, la mejor solución es la sonrisa. He aprendido que el dinero no da la felicidad, pero la pobreza tampoco, que la felicidad la producen los pequeños detalles y destapar un botellín de Coca-cola.
Insisto en aprender el verdadero significado de "las operaciones combinadas" y derivados temas de matemáticas.
Y ya me ha quedado claro que yo por los míos mato, que quien les haga llorar o pasarlo mal, no lo cuenta. He aprendido que las que van de "mosquitas muertas" son las más putas y que las apariencias engañan. He aprendido que el "hombre de tu vida" no se encuentra, sino que viene por si solo y que yo ya he encontrado al mío. He aprendido que las malas noticias, mejor que vengan por separado y no todas de golpe. Que todo ser querido en un pasado, siempre deja marca. Me he dado cuenta de que algunas canciones pueden hacerte llorar y que cada canción te recuerda a una persona específica.
También he aprendido el verdadero significado del ABURRIMIENTO e insisto en desaprenderlo. Pero me he dado cuenta de que con pocas personas he llegado a llorar de risa y que rodeada de miles de personas he sido capaz de aburrirme.
He aprendido, tristemente, pero he aprendido que odio engordar y no hago nada para no hacerlo y que aunque mi complexión sea delgada, yo me veo gorda.
He aprendido mucho este año, pero aún así, mi madre no está contenta de mis conocimientos adquiridos. Y me he dado cuenta de que los problemas son solo obstáculos que se nos presentan para darle emoción a la vida y aunque vengan de golpe, no todos son de gravedad máxima.
Y sobretodo y lo más importante probablemente, he aprendido a amar de verdad.
Espero que el 2012 sea igual o mejor que el 2011.
